20/11/2025.- www.tiempoar.com.ar.- Foto portada: Tras dos años de abandono, el Gobierno da total control a las empresas en las nuevas concesiones.
Las denuncias por el estado deplorable de las rutas luego de dos años de abandono obligaron al Gobierno a tomar medidas, que vuelven a enfocarse en beneficios a privados.
Luego de dos años de desidia, el Gobierno de Javier Milei decidió accionar algún tipo de mantenimiento sobre corredores viales nacionales. El proceso para concesionar corredores clave como la Autopista Riccheri, la Ruta 5 y la Ruta 3 se activó según indicó la Resolución 1843/2025, publicada este jueves en el Boletín Oficial. El nuevo esquema elimina los aportes del Tesoro.
Según pudo saber la Agencia Noticias Argentinas, la medida se suma a la reciente adjudicación de la Etapa I. El Gobierno Nacional oficializó el llamado a Licitación Pública Nacional e Internacional para la Etapa II de la Red Federal de Concesiones (RFC), luego de la gran cantidad de denuncias recibidas por el deplorable estado de las rutas nacionales, abandonadas durante la gestión del actual Gobierno, lo cual incrementó la cantidad de accidentes graves.
La iniciativa -según apuntaron desde el Gobierno- busca sanear las cuentas públicas al discontinuar un esquema que el Ejecutivo califica como “deficitario” y carente de beneficios tangibles para los usuarios.
De esta forma, la sostenibilidad financiera de los corredores dependerá exclusivamente de la eficiencia de los nuevos operadores privados, sin inyecciones de fondos por parte del sector público, lo cual deja la calidad del servicio a la buena voluntad del operador de turno.
El nuevo mapa de la concesión: Tramos y Rutas
La licitación de esta segunda etapa se estructura en dos grandes bloques geográficos que abarcan arterias neurálgicas para la producción, el turismo y la logística de la Provincia de Buenos Aires y La Pampa.
Tramo Sur – Atlántico – Acceso Sur Es el bloque más extenso y complejo, con una longitud total de 1.325,17 kilómetros. Dada su magnitud, se subdivide en tres ejes operativos:
Subtramo Sur (870,55 km): Comprende la gestión de las Rutas Nacionales N° 3 y N° 205, vías fundamentales para la conexión con el interior bonaerense y el transporte de granos.
Subtramo Atlántico (404,32 km): Abarca la Ruta Nacional N° 226, corredor transversal clave que conecta zonas portuarias y turísticas.
Subtramo Acceso Sur (50,30 km): Incluye los ingresos más críticos a la Ciudad de Buenos Aires y al aeropuerto internacional: la Autopista Ezeiza – Cañuelas, la Autopista Riccheri y la Autopista Jorge Newbery.
Tramo Pampa Este segundo bloque licita una extensión de 546,65 kilómetros concentrados exclusivamente en la Ruta Nacional N° 5. El contrato abarcará desde el Kilómetro 65 (zona de Luján, Buenos Aires) hasta el empalme con la Ruta Nacional N° 35 (Santa Rosa, La Pampa), un corredor vital para el agro que ha demandado obras de infraestructura durante años.

Continuidad y Control
El lanzamiento de esta segunda etapa no es un hecho aislado, sino que se encadena con la adjudicación, concretada en el día de ayer, de la Etapa I de la RFC. En esa primera instancia se definieron los operadores para los Tramos Oriental y Conexión, que suman otros 741 kilómetros a la red privatizada.
En cuanto a la fiscalización, la Dirección Nacional de Vialidad, organismo descentralizado bajo la órbita de la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía, mantendrá su rol como autoridad de aplicación.
Vialidad será la encargada de supervisar y controlar el cumplimiento estricto de los contratos de concesión actuales y futuros, velando por la calidad de la infraestructura y la seguridad vial de los usuarios en este nuevo marco de gestión privada.







