31/10/2025.- Salta al Instante.- Por Nico Ortiz.- Foto portada: Milei y Julio Quintana, dos miradas opuestas sobre el futuro de Argentina y los trabajadores.
El dirigente de Política Obrera, Julio Quintana, no dudó en calificar el resultado electoral reciente como una “prórroga dopada” para el gobierno de Javier Milei. En diálogo con Mabel Corrales en el programa Qué Parte No Entendiste???, Quintana planteó un análisis que desarma el relato oficial sobre el respaldo popular y alerta sobre un escenario social explosivo.
“Este voto no es un mandato para destruir los derechos laborales. Es una prórroga circunstancial lograda a base de manipulación económica y miedo social”, afirmó. Según el dirigente, en las semanas previas a las elecciones “el Tesoro norteamericano intervino con una inyección de cientos de millones de dólares en el mercado cambiario argentino para evitar una corrida y mostrar un espejismo de estabilidad”. Esa maniobra, aseguró, “salvó a los grandes fondos financieros internacionales y generó la sensación de que, si no ganaba Milei, venía el caos”.
Una reforma contra el trabajador
La principal preocupación de Quintana giró en torno al proyecto de reforma laboral que el gobierno pretende tratar en sesiones extraordinarias de enero. La describió como un “ataque frontal a los derechos conquistados por la clase obrera a lo largo de más de un siglo”.
“Quieren legalizar una jornada laboral de hasta 13 horas, eliminar el pago de horas extras, fragmentar las vacaciones en cuotas, romper las paritarias colectivas e imponer convenios por empresa”, enumeró. A esto se suma —dijo— “la instauración de un salario flotante, desligado de las necesidades del trabajador y dependiente de la rentabilidad empresarial, que además no podrá ser auditada por los propios trabajadores porque se invoca el ‘secreto comercial’”.
Para el referente de Política Obrera, el paquete de medidas es un retroceso histórico: “Se busca transformar en ley lo que ya se practica ilegalmente. En la minería, por ejemplo, hay un festival de tercerización: convenios de gastronómicos, mantenimiento y construcción reemplazan al convenio principal de AOMA. Hay fraude laboral, precarización y rotación permanente. Quieren borrar las garantías que aún quedan”.
“No hay costo laboral alto, hay fraude patronal”
En su diagnóstico, el problema no es el llamado “costo laboral” sino el incumplimiento sistemático de las leyes por parte de las patronales. “El costo laboral en Argentina está por el piso, comparado incluso con otros países de América Latina. Lo que existe es fraude laboral. La llamada ‘industria del juicio’ es una excusa para esconder esa realidad: trabajadores despedidos que reclaman lo que nunca se les pagó.”
Quintana explicó que, en la práctica, la mayoría de los trabajadores termina aceptando acuerdos irrisorios por la imposibilidad de sostener litigios largos. “Ahora quieren eliminar hasta esa mínima posibilidad de reclamar. Ya no cumplirían la ley, pero tampoco responderían ante la justicia.”
PyMEs en la cuerda floja
El dirigente también se detuvo en la situación de las pequeñas y medianas empresas, señalando que “muchas veces son utilizadas por las grandes patronales para evadir convenios laborales”. Sostuvo que el verdadero problema no está en los trabajadores, sino en las condiciones estructurales: “Con tasas de interés del 80%, el crédito está quebrado. Cualquier intento de inversión de una PyME se evapora en el sistema financiero. Si se quiere salvar a las PyMEs, hay que bajar las tasas, estimular el consumo y fortalecer el trabajo registrado.”
Según Quintana, la política actual condena a las pequeñas empresas al ahogo financiero mientras destruye el poder adquisitivo del salario. “Un país no se levanta ajustando a sus trabajadores, sino garantizando que puedan consumir lo que producen.”
La complicidad sindical
Otro de los ejes más duros de su crítica fue el papel de la dirigencia sindical. “La CGT está sentada negociando con el gobierno en el Consejo de Mayo, cuidando sus privilegios y sus cajas, no los derechos de los trabajadores”, denunció. “Defienden sus aportes solidarios y su reelección indefinida, pero no los convenios ni las condiciones de trabajo.”
Quintana comparó el momento actual con los años 90, cuando las reformas impulsadas por el menemismo fueron convalidadas por las mismas cúpulas gremiales. “El resultado fue devastador: desocupación, precarización y miseria. Hoy quieren repetir esa historia.”
El voto del miedo y la crisis de representación
Para el referente de Política Obrera, el voto a Milei expresó más desesperanza que convicción. “La gente no votó su programa, votó contra el pasado, contra la inflación y la frustración acumulada. Pero el voto del miedo no es un cheque en blanco. Cuando las promesas se derrumben, habrá un choque inevitable con la realidad”.
Ese choque, aseguró, será también con los gobernadores y sectores del peronismo que acompañan las reformas. “Primero Salta con Royón y otros espacios de Fuerza Patria ya están dispuestos a avalar esta reforma laboral. Se conforma una alianza estratégica contra los trabajadores”.
Una salida desde abajo
Frente a ese panorama, Quintana sostuvo que la única salida es “una política independiente de los trabajadores”. Propuso la autoconvocatoria, la coordinación de las luchas y la organización de una huelga general. “No se trata solo de resistir, sino de construir una alternativa política real que represente los intereses de quienes vivimos de nuestro trabajo”.
Y en ese sentido, destacó el avance electoral de Política Obrera como una señal: “Todavía modesto, pero es un progreso. Muchos trabajadores nos escucharon y van a poder balancear lo que decíamos en campaña con lo que está pasando”.
Para continuar ese debate, Quintana invitó a participar de una charla abierta este viernes 31 a las 20 hs en Santiago del Estero 971, sede de Política Obrera en Salta, y también a seguirla por Facebook Live.
“La clase trabajadora argentina no va a permitir que el país se convierta en una colonia norteamericana ni que se destruyan las conquistas sociales. Lo que viene —advirtió— será una gran lucha entre quienes quieren someter al pueblo y quienes están dispuestos a defender su dignidad”.







